MH17:
Investigadores australianos denuncian que Rusia no es la responsable del derribo
La investigación oficial de Australia sobre la causa del derribo del Malaysian Airlines MH17 han acusado a la Junta de Seguridad Holandesa (OSD) de no proporcionar "pruebas concluyentes" de qué exactamente destruyó la aeronave, y aseguran que Rusia no derribó el avión a pesar de las acusaciones de la OSD.
El principal especialista australiano que investiga el accidente del MH17, el superintendente detective Andrew Donoghue, testificó en una corte internacional recientemente diciendo que un "informe tan duro como el del OSD" requiere que antes de la investigación penal se pueda identificar el arma que causó el accidente.
Donoghue también testificó que diez meses después del accidente, sólo la mitad de los fragmentos de fuselaje del avión fueron entregados para su inspección y que "algunos fragmentos no eran pueden ser de los restos de la aeronave".
La investigación criminal continuará en 2016, Donoghue declaró en la Corte Forense el pasado martes por la mañana. Él y otros investigadores internacionales no están convencidos de la fiabilidad de los informes de los EE.UU. y el gobierno de Ucrania o de la OSD, de que un misil de tipo Buk fuera la causa del derribo. "Los fiscales holandeses requieren pruebas concluyentes sobre otros tipos de misiles", dijo Donoghue, dando a entender que "la información inicial de que el avión fue derribado por un Buk" no respondía a los test estándar australiano o internacional realizados.
El Tribunal Forense en Melbourne es el primero en el mundo en realizar una investigación sobre el accidente del vuelo MH17 derribado el 17 de julio de 2014, que causó la muerte de todas las personas a bordo. Iain West, médico forense del Estado presidió, después de que el médico forense del Estado titular, el juez Ian Gray, se retiró en el último minuto. Las comparecencias por la investigación comenzaron el pasado martes. Una segunda audiencia se programó para el miércoles, donde West anunciaría sus resultados. En el Reino Unido, donde la investigación sobre la muerte de 10 ciudadanos británicos, está siendo supervisada por la médico forense, Catherine Mason, todos los procedimientos judiciales se han suspendido sin fecha. Se informó en el tribunal de Melbourne que los expertos forenses británicos participaron en las investigaciones holandesas y los equipos alemanes, además de un grupo indonesio-malasio conjunto.
En la sala del tribunal de Melbourne los reporteros de prensa entrevistaron a los representantes de los familiares de varias de las víctimas. De los 28 ciudadanos australianos muertos, 11 eran del Estado de Victoria; 10 eran residentes permanentes en Australia; y 3 tenían estrechos vínculos con Australia. Un periódico local propiedad de Rupert Murdoch informó desde la sala del tribunal que "el vuelo de Malaysia Airlines con destino a Kuala Lumpur ... fue alcanzado por un misil de fabricación rusa tierra-aire sobre el este de Ucrania".
De hecho, Donoghue dijo a la AFP se trataba de una hipótesis no verificada por el OSD de "un misil de un tipo previamente proporcionada a Ucrania."
En el tribunal, además de los miembros del personal forense, había un agente de inteligencia del gobierno que mantuvo su etiqueta de identificación oficial dentro de su abrigo, y se negó a decir si era un ciudadano australiano o estadounidense.
Donoghue fue el testigo principal. Dirige un equipo de 22 policías australianos, especialistas forenses y agentes inteligentes destinado en Países Bajos y Ucrania. Fue seguido por el Dr. David Ranson, un patólogo de Victoria que dirigió un equipo de 4 investigadores; trabajaron en la base militar holandesa de Hilversum entre julio y agosto de 2014, después de que los cuerpos de las víctimas fueran llevados allí para la identificación y el análisis forense.
Donoghue expuso un informe completo, declaró a la AFP, donde se habían incluido los resultados forenses. Ranson ha presentado dos informes forenses -uno del 25 de agosto de 2014, y otro el 16 de diciembre de 2014. Hasta ahora, el juez de instrucción ha clasificado estos documentos como secretos.
Al testificar bajo juramento, Donoghue reveló por primera vez que el gobierno australiano había negociado en silencio dos acuerdos para investigar el lugar del accidente en el este de Ucrania. La primera, dijo, fue con el gobierno de Ucrania en Kiev para garantizar la seguridad alrededor del lugar del accidente. El segundo fue con los líderes de Novorussia para que los australianos pudieran llevar a cabo sus búsquedas de cuerpos de las víctimas, bienes y otros elementos de prueba, así como para instalar un puesto de mando en la ciudad de Donetsk.
Nunca antes los dirigentes australianos han reconocido a las autoridades prorusas. Donoghue se negó a decir quién firmó el acuerdo con los Novorusos. Por primera vez también, Donoghue reconocido públicamente que los investigadores internacionales no habían tenido "ninguna posibilidad para recoger piezas de aviones u otros desechos". No fue hasta mayo de 2015, agregó, que pudo comenzar el examen forense de la aeronave.
Evidencias de manipulación en el fuselaje del MH17 por parte del Consejo de Seguridad Holandés
Los restos de la aeronave recuperados fueron fotografiados y registrado en los Países Bajos por el OSD. La imagen-1 muestra la primera fotografía del OSD, con un solo agujero visible. La imagen-2 muestra una nueva fotografía publicada por el OSD donde aparece un segundo agujero… Ver aquí.
En su testimonio, Donoghue dijo que diez meses después del accidente, y después de que funcionarios de Kiev habían entregado menos de la mitad de los fragmentos del fuselaje a los holandeses, se descubrieron "algunos fragmentos no compatibles con restos de la aeronave".
¿Se encontraron esquirlas de un artefacto explosivo, de misiles o de proyectiles de cañón? Donoghue se negó a responder. La muerte de los pasajeros, testificó, fue causada por la "desintegración en vuelo [de la aeronave] y la descompresión inmediata", no por las municiones. La falta de metralla como evidencia de la causa de la muerte se analiza aquí.
La citaciones de la policía de Australia para que los testigos de Ucrania sobre el terreno declaren lo que puedan haber visto u oído aquel fatídico día, se emitieron en marzo de 2015, y luego de nuevo en junio. Algunos se han negado a declarar, declaró Donoghue, a menos que la policía australiana y holandesa les protegan en "un lugar seguro"; los funcionarios del gobierno de Ucrania han sido excluidos de declarar; y se mantiene la identidad de los testigos en secreto.
Cuando se le preguntó si había habido ninguna evidencia de falta de respeto hacia los cuerpos de las víctimas en el suelo -como se ha dicho en la presentación de algunos informes por los medios de Murdoch- Donoghue declaró que "no había evidencia de falta de respeto hacia los cuerpos."
Ranson, profesor asociado de patología forense y director adjunto del Instituto de Medicina Legal del Estado de Victoria, declaró en la corte que él y su equipo habían pasado dos semanas y media estudiando los cuerpos de las víctimas en Hilversum. Allí, por medio de radiografías y tomografías computarizadas se llevaron a cabo más de 700 autopsias. Declaró que cuando los cuerpos de las víctimas australianas fueron repatriados a la morgue del Tribunal Forense, una nueva tomografía computarizada fue tomada de cada cuerpo y comparadas con las tomadas en Hilversum. Los informes de Ranson descartan la presencia de metralla causada por un ataque con misiles en cualquiera de los cuerpos del MH17, lo que se ha mantenido en secreto hasta la fecha.
Bajo juramento, Ranson declaró que la muerte de los pasajeros había sido causada por la desintegración de la aeronave. Descartó la posibilidad de que una máscara de oxígeno que se encuentra en un cuerpo en el suelo hubiese sido usada por la víctima. No hubo pruebas de ADN para apoyar eso, y es poco probable, dijo Ranson, que el flujo de aire a alta velocidad a través de la aeronave en descompresión hubiera dejado tiempo a las víctimas de colocarse las máscaras de oxígeno. La muerte llegó demasiado rápido, cree Ranson.
La corte escuchó que los familiares de las víctimas del accidente han sido informados regularmente y asesorados por los funcionarios del Gobierno de Australia. También se les ha entrenado para no responder a las preguntas de la prensa, aunque se admitió que a las familias se les había permitido conocer a los abogados. Tres declaraciones se tomaron a los representantes de las víctimas. Uno de los miembros de la familia Van Den Hende - Shaliza Dewal, su marido Hans Van Den Hende y sus tres hijos Muelles, 15, Marnix, 12, y su hija Margaux, 8, murieron. En su declaración dijeron que los informes de prensa sobre el accidente eran poco fiables y poco convincentes: "no estamos seguros de a quién o qué creer."
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