Los informes indican que el ejército turco ha cruzado la frontera con Siria
El pasado sábado, el mundo geopolítico se sorprendió cuando Turquía comenzó a bombardear Alepo, donde la oposición siria tiene su espalda contra la pared ante el agresivo avance por parte de Hezbolá y el CGRI apoyados, por supuesto, por los ataques aéreos rusos.
Sin duda, todo el mundo sabía que Ankara y Riad tendrían que hacer algo rápido si querían preservar la rebelión. Sus representantes, están implementando rápidamente el ejército de Hassan Nasrallah ante el dominio de las fuerzas aéreas rusas de Vladimir Putin. Pocos esperaban que la escalada llegaría tan rápidamente.
Pero, Recep Tayyip Erdogan, es impredecible y este pasado fin de semana, decidió que no había mejor momento que el presente cuando se trataba de provocar el inicio de la III Guerra Mundial.
Oficialmente, Turquía defiende que está bombardeando, en defensa propia, posiciones kurdas en Siria. Todo lo que hacemos, dice Ankara es proteger nuestras fronteras contra los hostiles. Por supuesto, la idea de que el YPG pueda invadir Turquía es de risa. Los kurdos sirios han asegurado suficiente espacio en su propio país para poder declarar un proto-estado autónomo, y no aspiran ni necesitan sumar territorio turco.
"Están abusando del apoyo de Estados Unidos para capturar territorios de la oposición", dijo un funcionario turco, reflejando la ira de Ankara ante el hecho de que la ofensiva de Rusia y Hezbollah esté facilitando a los Kurdos consolidar sus ganancias. "Estados Unidos debería dejar operar a Turquía en lugar pedirla que se detenga."
Pero para Erdogan, el problema es precisamente que Ankara teme que las ganancias del YPG envalentonarán los frentes militar y políticos Kurdo turcos del PKK y HDP, y las pasadas elecciones del mes de Junio sugieren claramente que una minoría kurda envalentonada tendría poder suficiente para sacudir la escena política.
Así, Turquía está preparada para presentar pelea contra Siria en nombre de la lucha contra los "terroristas", lo que para Erdogan, significa la erradicación de los kurdos. Como señalamos el sábado, el reto para Ankara y Riad es el siguiente: De alguna manera, Turquía y Arabia Saudita se ven en la obligación de encontrar la manera de hacer girar la situación atacando al YPG realizando un esfuerzo que permita rescatar a la oposición en Alepo mediante una supuesta operación anti-ISIS, aunque sabemos que ISIS no tiene una gran presencia en esa zona.
Increíblemente, Turquía parece menos preocupada de lo que pensábamos. En resumen, parece como si Erdogan estuviese dispuesto a entrar en guerra bajo el pretexto de que Turquía debe hacer retroceder el YPG, que recordemos está respaldado explícitamente por EE.UU..
Para que todo tenga sentido, no es posible golpear Alepo y utilizar a ISIS como excusa, ya que la presencia de este grupo no es suficientemente grande en la zona. Pero si se puede decir "el PKK son terroristas, están aliados con el YPG, cuyo bastión es Alepo, por lo tanto, tenemos que bombardear Alepo."
Barrio de Saif al Dawle de Alepo
Traducido a términos simples, lo que en realidad Erdogan está haciendo es tratar de reabrir las líneas de suministro cerradas por Rusia e Irán, mediante la aniquilación de las fuerzas kurdas que dominan la frontera norte de Turquía.
El siguiente video muestra las secuelas de los bombardeos, que al parecer se han cobrado la vida de al menos dos civiles.
(como informa RT ", en un video difundido por la agencia de noticias Kurda de Siria, ANHA, las imágenes muestran edificios dañados y gente corriendo que ayuda a los heridos en el pueblo de Maryamayn cerca de la ciudad de Afrin")
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