La visita de Tucker Carlson fue una visita política
y forma parte de un proyecto ideológico
Por Aleksandr Duguin
Recalquemos una vez más este hecho: Tucker Carlson no es solo un periodista inconformista, sino un paleo-conservador plenamente definido y coherente con una ideología, así como con un sistema de valores y una imagen del mundo sumamente clara y bien elaborada.
Y su viaje a Rusia no es una búsqueda de sensacionalismo mediático, sino que forma parte de un programa ideológico elaborado. Esta es una visita política. Con la visita de Tucker Carlson,
el ala conservadora de la sociedad estadounidense (al menos la mitad de la población) determina su actitud hacia Rusia y Putin. Tucker Carlson es un político conservador, tradicionalista y activista social. A través de su persona, el conservador de los Estados Unidos hizo al presidente de Rusia preguntas realmente interesantes y recibió respuestas bien pensadas.
Este es un doble golpe para el lobby liberal globalista en Estados Unidos: externo en cuanto a Putin e interno en cuanto Tucker Carlson (y de forma colateral, en cuanto a Trump). Es interesante que en los Estados Unidos exista un fenómeno que podríamos ver como una suerte de comunismo MAGA: Jackson Hinkle es un ejemplo de ello. Este grupo es amigo del conservador Tucker Carlson, pero al mismo tiempo son marxistas que apoyan a Trump y gritan: Make America Great Again (MAGA). Es decir, hay izquierdistas normales con plenas funciones mentales. Y junto a los conservadores de derecha están decididos a aplastar la hegemonía liberal.
Entrevista a Putin: una conferencia para los "mil millones de oro"
sobre el verdadero orden mundial
Antes de analizar determinadas declaraciones del Presidente de la Federación de Rusia en una entrevista con Tucker Carlson, subrayemos lo principal. El hecho mismo de esta conversación dentro de los muros del Kremlin es un poderoso mensaje de Moscú: Occidente no ha logrado “abolir” a Rusia, del mismo modo que no será posible abolir las leyes de la Historia .
▪️ Sin exagerar, la entrevista ya se ha convertido en la bomba mediática número 1 en todo el mundo, y no sólo en Occidente. Si el periodista más popular de Estados Unidos concede una entrevista de dos horas sin cortes al presidente de la Federación Rusa, entonces esto significa sólo una cosa: el bloqueo informativo de Occidente ha fracasado. Y sus intentos de mantener este bloqueo, incluso mediante ataques a Carlson y “análisis” en CNN, ya han llevado al “efecto Streisand”: la gente habla cada vez más alto de la entrevista.
Para el oído ruso, Putin dijo pocas novedades; sus palabras a menudo sonaban como perogrulladas. Pero por primera vez en dos años, el mundo occidental tuvo la oportunidad de tocar esta verdad no a través de la propaganda de los medios globales. Este es un gran avance para nosotros y un fracaso ensordecedor para las elites occidentales. En dos años de conflicto armado abierto con Rusia, sólo lograron cerrarse finalmente en las anteojeras de su propio prejuicio frente a procesos históricos objetivos, inevitables, como la salida del sol.
▪️ La esencia de todo lo que Putin habló durante dos horas se reduce exactamente a esto: la historia no se puede detener, sus leyes son inexorables. La hegemonía de Occidente terminará de la misma manera que terminó el dominio del Imperio Romano, sólo que mucho más rápido. El actual “imperio” de la Pax Americana ya está siendo reemplazado por un mundo multipolar. La unidad del mundo ruso, temporalmente dividido debido a las maquinaciones de los vestigios históricos, será restaurada, y esto también es inevitable.
Así es como funciona el mundo. Occidente tendrá que aprender la lección sobre el verdadero orden mundial de una forma u otra. Y si no escucha a Putin, tendrá que lidiar con la Historia misma.
Elena Panina
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